Nelson Portugal

Ayuno digital: ¿qué hacer cuando no estamos en línea?

El domingo pasado entré a las redes sociales a las 6:30pm.  Fueron cerca de 10 horas de «ayuno digital», y ha sido uno de los mejores domingo – en mucho tiempo.

El impacto del ayuno digital

Estas son algunas de las cosas que hice durante ese tiempo:

  1. Ordené una parte del departamento que había estado procrastinando hace un tiempo.
  2. Cociné un almuerzo “completo”, es decir: con ensalada, entrada, segundo y refresco.
  3. Limpié la refrigeradora.
  4. Dejé el ajo y el kion listo para las próximas dos semanas.
  5. Hice un postre que, como un  beneficio adicional, le gustó a mi esposa.
  6. Limpié los cables de los cargadores de la laptop, celular y otros.
  7. Hice diez minutos de ejercicio intenso, algo que no había hace varios meses.
  8. Saqué el auto a ponerle gasolina, algo simple pero que pude disfrutar.
  9. Vi una película, sin distracciones.
  10. Escuché a mi esposa atentamente.

Lo común entre estas diez actividades es que las hice sin sentir que «debería» estar haciendo algo más, una sensación frecuente que – en mi opinión – proviene de la ansiedad que generan las redes sociales.

Al dar las siete de la noche, aún quedaba gran parte del día así que decidí pasarlo fuera de redes también. ¿El resultado? Tuve más momentos de conexión conmigo mismo y mi familia.

Mi meta es seguir teniendo más días de ayuno digital, especialmente los fines de semana.

Si lo hacen me cuentan cómo les va.