Nelson Portugal

Déjalo ir

He aprendido muchas cosas en mi vida.

Pero, sobre todo, he aprendido a dejar ir.

Lo aprendí recién, no te voy a mentir.

Hace poco aprendí a dejar ir, a realmente dejar ir.

Déjalo ir

A dejar ir:

  1. Una sonrisa de la chica que me gusta pero sé que no me hace bien.
  2. Una «oportunidad» de negocios que me distrae de lo que quiero en la vida.
  3. Una parte del buffet que comería solo para «aprovechar» lo pagado.
  4. Una cerveza más que luego se convierten en diez.
  5. Un pensamiento, que solo me trae un sentimiento de culpa, sobre lo que debí haber hecho pero no hice.
  6. Un mensaje por inbox de una chica casada que quiere verme a solas para engañar a su esposo.
  7. Un email insultando quién soy, lo que hago y por qué lo hago.
  8. Una respuesta negativa de alguien que aprecio, de quien – por el tipo de relación que tenemos – espero una respuesta positiva.
  9. Una mirada de desprecio de alguien que no está en sintonía con mi filosofía de vida.
  10. Una persona que quiero inmensamente, pero me hace sentir mal en lugar de agregar valor en mi vida.

Sí, a lo largo de mi vida (y mi carrera profesional) he recibido ese tipo de invitaciones y mensajes en múltiples ocasiones, las que te conté líneas arriba.

Y son exactamente ese tipo de situaciones las que aprendí a dejar ir.

Recién, te digo.

Pero, gracias a ello, es esto lo que tengo para decirte el día de hoy querido(a) amigo(a):

Deja ir.

Piensa en lo que ya sabes que debes dejar ir y déjalo ir.

Dejar ir lo que no necesitas para lograr lo que quieres en la vida.

Lo que no te hace bien.

Lo que no quieres en tu vida.

Con lo que no quieres lidiar día a día.

Déjalo ir.

No me preguntes cómo.

Tú sabes cómo hacerlo.

Solo déjalo ir.

Vete, sigue avanzando, ignora, muévete, continúa.

Deja ir.

Déjalo ir cuanto antes.

Déjalo ir ahora.

Eso es lo que necesitas en este preciso instante de tu vida.

…dejar ir.

Deja ir y piensa en lo realmente quieres lograr.

En lo que te emociona en la vida.

En lo que te gustaría ver funcionando en el mundo.

Piensa en lo que es realmente importante para ti.

Enfócate en ello.

Y, sobre todo, haz algo para convertirlo en una realidad.

Hazlo en cuanto te sea posible.

Hazlo ahora.

Hazlo pese a todas las dificultades que se te presenten en la vida.

Créeme, valdrá la pena.

Pruébalo ahora:

Deja ir lo que no te ayuda a progresar en tu vida y empieza a crear lo que quieres ver en tu día a día.

Nada más importa.