Guarda silencio.

En tu próxima conversación, cuando la persona que tienes al frente te esté hablando, guarda silencio.

Escucha lo que él o ella tiene para decirte.

No adivines, no digas lo que piensas acerca de ello – no inmediatamente -, guarda silencio, sonríe y luego, solo luego:

Cómo mejorar tus relaciones interpersonales

Haz una pregunta.

No digas lo que sabes acerca de lo que te acaba de decir, no necesitas validarte.

Mejor, pregúntale acerca de lo que aún no sabes, aprenderás algo nuevo que te servirá por el resto de tu vida.

Y, adicionalmente a ello, la persona que tengas al frente se sentirá escuchada, apreciada, querida.

Su relación se fortalecerá, se preocuparán más el uno por el otro: crecerán y con ello, el mundo también.

Conversación por conversación.