El día de ayer salió publicada la entrevista que me realizaron en el diario El Tiempo acerca de qué es lo que pienso sobre «el éxito» y «la felicidad».

En esta entrevista aprenderás qué es lo que necesitas para progresar realmente en tu vida, tanto a nivel personal como profesional.

A continuación podrás leer el artículo publicado por el diario, junto con el «detrás de cámaras» de la entrevista que incluye algunos conceptos que no aparecen en la publicación del diario.

Cómo progresar en la vida

Periodista: ¿Qué es el éxito y cómo se diferencia de la felicidad?

Nelson: El éxito es la capacidad de lograr lo que queremos en la vida y la felicidad es tener la sabiduría de disfrutar lo que conseguimos.

Al plantearlo de esta forma suena sencillo, ¿verdad? Pese a ello, ambos términos deben utilizarse cuidadosamente, especialmente cuando se trata de éxito y felicidad personal.

La razón es bastante simple: con frecuencia solemos utilizar el «éxito» y la «felicidad» como objetivos finales en la vida cuando, en realidad, los dos son estados emocionales que experimentados todas las personas – sin expeción – a dario.

De hecho, todas las personas que están leyendo este artículo han conseguido el éxito de alguna forma y son felices en ciertos momentos.

Todos hemos logrado algo que nos hemos propuesto y todos, en algún momento de nuestra vida, nos sentimos orgullosos y agradecidos de lo que tenemos.

¿Por qué entonces perseguir algo fuera de nosotros que ya tenemos dentro de nosotros?

Mi opinión es que debemos enfocarnos más en progresar constamente en nuestras vidas y contribuir con el desarrollo de los demás.

Estos últimos son objetivos o, mejor aún, estilos de vida que son sostenibles en el largo plazo y nos darán, como consecuencia, el tan anhelado «éxito» y la tan deseada «felicidad».

Nelson: En la actualidad, comparado con algunos años atrás, el ritmo de trabajo es una constante – no se detiene.

La razón de este coyuntura es bastante simple: el desarrollo de nuevas tecnologías permite que cualquier persona esté conectada con diferentes personas alrededor del mundo en cualquier momento y lugar.

Esto quiere decir que la barreras que la distancia creaba, se ha perdido. Hoy en día, no importa el lugar en el cual estemos, siempre estamos conectados a un dispositvo electrónico que nos conecta con el resto del mundo y, por ende, con nuestro trabajo.

Ahora, podríamos decir que este avance tecnológico es un retraso o un pérdida de la vida personal pero la verdad – creo yo – es que es una inmensa ventaja para el progreso de la humanidad.

El problema surge, principalmente, cuando no sabemos manejar los dos recursos más importantes que tenemos: nuestros pensamientos y nuestras acciones.

Un ejecutivo(a) que no sabe cómo influir en sus pensamientos y en sus acciones será una persona que se deje llevar por las «urgencias» y «oportunidades» que el mundo le presente y no podrá enfocarse en sus prioridades, tanto profesionales como personales.

Periodista: ¿Qué intereses mueven a las personas en la actualidad?

Nelson: Hoy en día la mayoría de personas, especialmente aquellas dentro de la PEA (Problación Económicamente Activa), buscan dos objetivos principalmente: impacto y libertad.

Las personas han reconocido el valor de su libertad y buscan poder decidir en dónde trabajo, en qué trabajar, cuánto tiempo trabajar, por qué monto trabajo y, sobre todo, reconocen que el dinero no lo es todo.

Los ejecutivos en la actualidad han empezado a valorar con mayor intesidad el impacto que pueden generar con sus recursos: tiempo, actividad, energía, etc.

Dicho esto, podemos ver que el mundo corporativo está pasando por una transición bastamente importante – creo yo: está pasando de ser un mundo B2B (Business to Business en inglés, Negocio a Negocio en español) a ser un mundo C2C (Consumer to consumer, consumidor a consumidor).

Esto quiero decir que más personas están poniendo sus propios negocios y buscan, de alguna forma servir a la sociedad. Especialmente a través de servicios especializados y personalizados.

Periodista: ¿Qué factores nos alejan de nuestros objetivos?

Nelson: Las distracciones disfrazadas de oportunidades.

Muchos de nosotros hemos escuchado alguna vez en nuestras vidas la frase «aprovecha las oportunidades que se te presenten». Para mi, ése es el uno de los errores más grandes que podemos comenter en nuestra vida.

Las oportunidades «que se nos presentan» pueden ser adecuadas en relación al costo/beneficio, sin embargo, la mayoría de ellas no están alineadas con lo que queremos en nuestra vida.

Y, si ése es el caso, aquella «oportunidad» que se nos presenta es simplemente una distracción. Una distracción que nos parece contraproducente rechazar y, a la vez, nos aleja de nuestros objetivos al aceptar.

En este contexto,creo que en el mundo en el que vivimos – de infinitas opciones – uno de los principales factores que nos distraen de nuestros objetivos son dos: (1) no saber lo que queremos en la vida y (2) aceptar oportunidades que en realidad son solo distracciones.

Periodista: ¿Qué medios nos llevarán a alcanzar nuestras metas profesionales en el futuro?

Nelson: Dos: nuestros pensamientos y nuestras acciones.

La razón por la que nuestros pensamientos es el primer medio que nos permitirá lograr nuestros objetivos es porque ellos son los que determinan cómo nos sentimos y cómo reaccionamos frente a aquello que nos sucede en la vida.

Y la razón por la que nuestras acciones son el segundo medio es porque ellas son las que determinan lo resultados que conseguimos en cada área de nuestra vida

Teniendo esto en cuenta, una pregunta adicional surge: ¿En qué tendríamos que pensar y qué tendríamos que hacer?

La respuesta es la siguiente: para poder alcanzar nuestros objetivos profesionales tendríamos que pensar constantemente en lo que queremos conseguir – en lugar en lo que no queremos – y tendríamos que tomar acciones que nos ayuden a conseguir lo que queremos.

¿Suena simple? Entonces hagámoslo más seguido.

Periodista: ¿Qué ténicas o métodos podemos poner en práctica?

Nelson: El desarrollo personal constante.

Si hicieramos un análisis en este momento del lugar donde las personas están poniendo sus recursos (tiempo, energía y dinero) veríamos que solo un pequeño porcentaje – y lo más probable que sea 0% – está destinado a actividades que les permiten desarrollarse personalmente.

¿Maestría? ¿MBA? ¿Universidad? ¿Diplomados? Todas ellas muy importantes, pero ninguna encaja dentro del desarrollo personal.

Pensémoslo: todas nos enseñan cómo ser mejores profesionales: vender más, hacer un mejor análisis de mercado, admistrar de manera más efectiva una empresa, etc.

¿En qué momento, sin embargo, aprenderemos a manejar nuestras emociones, a dirigir nuestros pensamientos, a comunicarnos de manera más efectiva, a realizar un planeamiento estratégico personal?

Mi opinión es que debemos encontrar un balance entre el desarrollo profesional – ser mejores profesionales y en desarrollo personal – ser mejores personas.

Lo primero nos permitirá ascender en nuestro trabajo o crecer nuestro negocio de manera lineal. Lo segundo, de manera exponencial.

Periodista: ¿Cómo afrontar el miedo o circustancias que nos alejan de nuestros objetivos?

Nelson: Personalmente creo que los miedos son una señal que nos indica que estamos en el camino correcto.

Las personas no sentimos miedo cuando hacemos algo que ya sabemos que funciona, que lo sabemos hacer, que lo conocemos. Por ende, si no sentimos miedo es porque estamos haciendo algo que ya hemos hecho anteriormente.

Lo último se reflejará en los resultados: los mismos que hemos obtenido en el pasado.

Sentir miedo, entonces, es parte natural del proceso de crecimiento y, en lugar de intentar alejarnos de él, nuestra labor es actuar pese a él.

De hecho, la única forma de progresar en nuestras vidas es cruzando, lo que yo llamo, «el puente de la incomodidad, del miedo y de la incertidumbre».

¿Cómo? Hay técnicas que podrían ayudar, pero la estrategia que realmente funciona es simplemente entendiendo que el miedo siempre estará ahí y que actuar pese a él es lo único que nos diferenciará de los demás.

Periodista: ¿Cómo el profesional puede vislumbrar un futuro exitoso sin problemas?

Nelson: No puede.

Hace poco hablaba con un amigo que es dueño de una compañía que factura alrededor de 70 millones de dólares anuales y me contaba que lo único constante en su empresa son los problemas.

De hecho, me decía él, «el único momento en el que no tengo problemas es cuando no crezco».

Y si lo analizamos, tiene mucho sentido: los problemas, al igual que el miedo, son consecuencia natural de hacer más y mejores cosas.

La diferencia será que los problemas será diferentes, será nuevos, y – también – serán más grandes.

Mi invitación a todos los profesionales que leen estas líneas es: empiecen a ver el placer en el dolor, el aprendizaje en el error, el descubrimiento en la confusión, la oportunidad en la incertidumbre y el valor en la incomodidad.